¿Qué es el comercio justo?
El comercio justo es una transformación profunda de las relaciones económicas que existen entre las personas que producen los alimentos y quienes los consumimos. Como modelo económico y social, busca que, pequeños agricultores, artesanos y comunidades, reciban un pago justo por sus productos, en condiciones dignas de trabajo y con prácticas sostenibles que aseguren los ecosistemas en donde se llevan a cabo estas actividades.
Como escribe Laura T. Raynolds en Fair Trade: The Challenges of Transforming Globalization, “El comercio justo no busca solo transacciones justas, sino transformar las estructuras desiguales del mercado global.” En pocas palabras: es vender y comprar de forma más ética, pensando en la justicia social y no solo en el beneficio económico.
¿En qué se basa el comercio justo?
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Precios justos
Se paga a los productores un precio que cubra los costos de producción y les permita vivir dignamente, incluso si el mercado baja. -
Relaciones comerciales estables
Se fomentan contratos a largo plazo para dar seguridad económica y permitir la planificación. -
Condiciones laborales dignas
Sin explotación laboral, con igualdad de género, seguridad y respeto a los derechos humanos. -
Producción sostenible
Evita pesticidas peligrosos, promueve buenas prácticas agrícolas y protege los ecosistemas. -
Empoderamiento comunitario
Una parte de las ganancias se reinvierte en proyectos sociales y comunitarios.
¿Cómo es el comercio justo en México?
México fue pionero en usar el comercio justo como estrategia de resistencia campesina y no solo como una herramienta comercial. A nivel internacional, se distingue por el volumen de producción, la diversidad cultural, biológica y organizativa que aporta.
Aunque muchos países se enfocan en 1 o 2 productos, México destaca porque exporta más de 10 variedades: café, cacao, miel, azúcar, vainilla, aguacate, mango, ajonjolí, amaranto y artesanías, bajo este esquema.
La gran biodiversidad y a las prácticas agrícolas tradicionales que, por naturaleza, ya cumplen con estándares de sustentabilidad abona a que esta sea una práctica que va a la alza. Los productos que comúnmente cuentan con mayor número de certificaciones son:

Café
Fomenta la producción orgánica y la conservación de los bosques.
Los estados con la mayor cantidad de productores son Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Puebla, quienes usan cooperativas y asociaciones indígenas o campesinas.
Buscan asegurar un precio mínimo de compra garantizado protección contra las caídas del mercado internacional.

Cacao
Comunidades y pequeños productores de Tabasco, Chiapas y Guerrero del suroeste mexicano incentivan el comercio justo a través de la producción agroforestal (cacao bajo sombra, con árboles frutales y maderables que respeta la selva) y promueve la transformación local a través del chocolate artesanal, generando así que el valor agregado quede como un ingreso en la comunidad.

Miel
Aunque la miel mexicana más famosa es la de la península. México tiene una diversidad productiva enorme. Desde el centro de la Ciudad de México, hasta Campeche.
Certificaciones combinadas con comercio justo, aseguran su calidad ya que el producto es natural y libre de químicos.
Su consumo asegura una adecuada producción agrícola, reforestación y la conservación de abejas nativas (melipona).
El sistema funciona con organización que generalmente surge desde las comunidades de productores o con iniciativas que buscan certificar las prácticas agrícolas asociadas a la calidad de los productos, algunas figuras son:
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Organización en cooperativas o asociaciones
Los productores se agrupan para negociar juntos y obtener certificaciones. -
Certificación
Sellos como Fairtrade, WFTO o Símbolo de Pequeños Productores garantizan que el producto cumple las normas de comercio justo. -
Venta directa o a través de intermediarios éticos
Se vende o exporta en mercados nacionales que apoyan el modelo (tiendas orgánicas, ferias, mercados de productores, plataformas en línea). -
Pago de precio justo + prima social
El comprador paga más del precio de mercado y añade un extra (“prima”) para proyectos comunitarios: escuelas, clínicas, sistemas de riego, etc.
¿Cómo participar?
Como consumidor en México, puedes participar en el comercio justo de varias maneras, desde tus compras diarias hasta tu participación en iniciativas comunitarias. La idea es que tu decisión de compra sea una herramienta de cambio social y ambiental.
1. Comprar productos con trazabilidad o certificación.
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Busca sellos como:
- Fairtrade International (azul y verde)
- Símbolo de Pequeños Productores (SPP)
- World Fair Trade Organization (WFTO)
- Aplica para café, cacao, miel, azúcar, té, frutas, artesanías y más.
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En México, puedes encontrarlos en:
- Tiendas orgánicas y de productos locales.
- Supermercados con sección de comercio justo.
- Cafeterías especializadas en café de especialidad.
2. Preferir comercio directo o “de productor a consumidor”
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Comprar en:
- Tianguis y mercados orgánicos.
- Ferias artesanales donde se indiquen precios justos.
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Canastas de hortalizas por suscripción de huertos agroecológicos.
3. Difundir y educar
- Recomendar a amigos y familiares marcas de comercio justo.
- Compartir en redes sociales historias de productores.
- Asistir a eventos, catas o charlas sobre consumo responsable.
4. Apoyar con tu poder de compra
- Aunque un producto justo pueda ser un poco más caro, ese sobreprecio es inversión social: garantiza mejores salarios, proyectos comunitarios y prácticas sustentables.
- Piensa en cambiar un producto básico (por ejemplo, tu café diario) por una versión de comercio justo. Un cambio pequeño pero constante tiene mucho impacto.
Como mexicanos podemos sentirnos orgullosos de que nuestro país, es uno de los 3 principales exportadores mundiales de café de comercio justo, y está entre los países con mayor número de organizaciones productoras certificadas en América Latina.
Aunque el comercio justo históricamente se enfocaba en exportación, México ha desarrollado un mercado interno con tiendas, cafés y mercados que promueven el consumo responsable. Esto lo diferencia de países donde casi toda la producción justa se envía fuera.
¿Qué productores colaboran con Numu?
En Numu pensamos que los agricultores no son proveedores de materias primas baratas, son cuidadores de la vida, por lo tanto construimos con ellos. Desde productos certificados hasta productores pequeños. Buscamos generar sinergias con cooperativas indígenas, proyectos agroecológicos familiares, emprendimientos de mujeres rurales que mejoren nuestro país y que tienen algo en común:
- Practican producción limpia y regenerativa
- Revalorizan el territorio
- Buscan autonomía económica
Como afirma Eric Holt-Giménez en Food First: Food Movements Unite!:
“No hay soberanía alimentaria sin justicia económica para quienes producen.” y eso es lo que defendemos en Numu: soberanía y justicia en cada alimento.
Súmate al comercio justo real
Conoce los productos de los proyectos con los que colaboramos